Independientemente de tu edad, nivel o tipo de ciclismo que practiques, hay algo común entre la mayoría de los ciclistas: buscar el máximo placer al montar optimizando el rendimiento. Para ello, necesitas comodidad y eficiencia, lo que implica una bicicleta que no solo se ajuste a tus necesidades, sino también a tu talla. La elección de la bici depende del tipo de actividad que realices, tus objetivos y expectativas. No es lógico usar una bicicleta de ciudad para una carrera de larga distancia ni una de pista para ciclocross, aunque a veces se ve, pero es más una excepción o curiosidad.
Una bicicleta adecuada te permitirá pedalear con comodidad y mejorar tu rendimiento. Si eliges bien, lograrás una buena postura, evitando tensiones y dolores, especialmente en zonas como la espalda, cuello o piernas. Existen fórmulas para elegir la talla ideal, pero al final, todo depende de tu cuerpo y sensaciones personales al montar.
Busca ergonomía para encontrar el tamaño perfecto de la bici
Los especialistas del taller de MaquinaBikes.com nos explican que la clave para evitar dolores y mejorar el rendimiento en la bicicleta es una buena postura. La ergonomía juega un papel central en esto. Como disciplina científica, busca lograr la máxima precisión en cada ajuste, lidiando con las distintas dinámicas del cuerpo al pedalear.
El ciclista enfrenta cinco puntos clave que limitan su movimiento al pedalear: los pies, que ejercen presión sobre los pedales; la pelvis, que descansa sobre el sillín; y las manos, que sujetan el manillar en diferentes posiciones. Estos puntos de apoyo cambian constantemente y son determinantes tanto para la comodidad como para el rendimiento.
Es importante recordar que cada persona es única. La postura y las necesidades de cada ciclista no solo dependen de su fisonomía, sino también de su historial médico o deportivo. Factores como lesiones previas, cirugías, hábitos laborales o el nivel de flexibilidad y resistencia influyen en la postura ideal. Además, estas condiciones cambian con el tiempo. Lo que hoy es cómodo y eficiente, puede no serlo en el futuro debido a cambios físicos o ambientales.
No se trata solo de los puntos de contacto, sino también de las superficies de apoyo. El cuerpo del ciclista interactúa con varios accesorios, como zapatillas, pantalones o guantes, que influyen en cómo se distribuyen las fuerzas durante el pedaleo. A lo largo de un recorrido, estas superficies y su interacción con el cuerpo también varían, lo que afecta al rendimiento y la comodidad del ciclista.
El tamaño de la bici deberá ir ligado a la práctica
En MaquinaBikes, los trabajadores destacan la importancia del ergonomista, que a menudo es un amigo con conocimientos de mecánica o un miembro del club. Su tarea es crucial para optimizar el pedaleo y equilibrar las fuerzas corporales, asegurando que todas las acciones durante la actividad ciclista sean armoniosas. Este papel es especialmente relevante hoy en día, dado que muchas personas adquieren bicicletas a través de revendedores de productos industriales. Estos revendedores deben ofrecer un asesoramiento personalizado para garantizar que la bicicleta se ajuste adecuadamente a las necesidades individuales.
Una bicicleta que no tenga el tamaño adecuado, ya sea demasiado pequeña o demasiado grande (incluso por uno o dos centímetros), no ofrecerá el mismo nivel de disfrute, rendimiento ni confort que una bicicleta perfectamente ajustada. Además, cada tipo de ciclismo puede requerir adaptaciones específicas, comenzando por el marco de la bicicleta, que es el punto de partida fundamental.
El triángulo principal del cuadro, compuesto por el tubo de sillín (para la altura), el tubo superior (para la longitud) y el tubo diagonal (para la rigidez), es determinante en el ajuste de los componentes periféricos como las bielas, el manillar, la potencia y la tija del sillín. Sin embargo, en algunas bicicletas, como las urbanas, plegables o de carga, el diseño del cuadro puede ser más complejo y no seguir el patrón del triángulo tradicional. En estos casos, es importante considerar la altura del sillín y la distancia entre la punta del sillín y el manillar.
Para encontrar el marco adecuado, especialmente si no se tiene experiencia previa, puede ser útil realizar un estudio postural. Este análisis permite determinar las dimensiones ideales de la bicicleta según las características físicas del usuario. Es importante destacar que, aunque este tipo de estudio es muy beneficioso, no está reservado únicamente para bicicletas personalizadas.
Sin embargo, lo que se aplica a una bicicleta de carretera, diseñada para el rendimiento, no necesariamente se ajusta a las necesidades de una bicicleta de ciudad o de montaña.
Elección de la altura adecuada
Desde hace casi 150 años, se han desarrollado varias fórmulas para determinar la talla adecuada del cuadro de una bicicleta, basándose principalmente en la longitud de la entrepierna. Para medirla, debes estar descalzo, de pie contra una pared, con las piernas ligeramente separadas, y medir desde el suelo hasta el perineo.
En bicicletas de carretera, la fórmula es: longitud de la entrepierna (en cm) multiplicada por 0,66, mientras que para bicicletas de montaña es: longitud de la entrepierna (en cm) multiplicada por 0,59. Sin embargo, el tamaño del marco no siempre se expresa en centímetros; también puede ser en pulgadas o mediante letras como XS, S, M, L, XL, XXL. Los avances tecnológicos, como los cuadros de carbono y los tubos superiores inclinados, han llevado a cambios en los códigos de tamaño, y los fabricantes pueden variar en sus medidas.
Hay que buscar la longitud adecuada
La longitud del cuadro de una bicicleta es crucial para el confort del ciclista, especialmente en recorridos largos. La medida óptima del cuadro se basa en la proporción entre la longitud de la pierna y la cintura, lo cual ayuda a ajustar la relación altura/longitud del cuadro. Para calcular esto, divide la longitud de tu pierna entre la medida de tu cintura. Si el resultado es 0,48, la longitud del cuadro debe ser tu altura más 1 cm. Si es menor, la longitud debe ser menor que tu altura más 1 cm; si es mayor, la longitud debe ser mayor.
Actualmente, no existe una normativa uniforme entre fabricantes, y el cuadro estándar “cuadrado” ha sido reemplazado por diferentes tipos de bicicletas y materiales. Las tablas de referencia basadas en promedios pueden servirte, pero ten en cuenta que pueden variar entre personas. Si estás entre dos tallas, elige la más pequeña para un uso deportivo y la más grande para un uso más recreativo.
Además, el tamaño del cuadro se adapta a diferentes tamaños de ruedas, como 26”, 27,5” o 29” para bicicletas de montaña, o 650 y 700 para bicicletas de carretera. Para quienes miden menos de 1,60 m, las ruedas más pequeñas son más maniobrables. Para quienes miden más de 1,60 m, las ruedas grandes ofrecen mayor estabilidad. A mayor distancia entre ejes, mayor estabilidad, pero menor maniobrabilidad.