Si no nos movemos por el mundo de la construcción ni trabajamos en este campo, entonces es posible que no conozcamos bien el poliuretano ni sus características o usos, pero este material es uno de los más versátiles y de los más utilizados para todo tipo de productos y construcciones. Podemos hallarlo en multitud de objetos dentro de las casas, como en los estropajos, en las zapatillas, dentro de los colchones, en las paredes, y demás; en los transportes como barcos, coches y motos; en la propia calle, etc.
Además, una de las herramientas más habituales del poliuretano es la de servir como sellador, y quizás sea este el motivo por el que has acudido a este artículo.
Si quieres conocer las características esenciales sobre este material quédate porque te contamos cómo utilizarlo para sacarle el máximo provecho en casa.
¿Qué es el poliuretano?
El poliuretano se entiende como un polímero, o un material derivado del plástico, que se obtiene de la combinación de bases hidrofílicas con diisocianatos. Es por esto que el poliuretano se clasifica en dos grupos distintos en función a la estructura química que posee o, lo que es lo mismo, a su comportamiento frente a la temperatura: los termoestables y los termoplásticos.
Una de las características principales del poliuretano es que es un material completamente adaptable, lo que significa que su estructura puede ser rígida o flexible y que por tanto las aplicaciones que pueden dársele son muy variadas.
Aún así la forma que se le da en la mayoría de usos es la de el poliuretano en espuma, ya que este permite colarse en cualquier tipo de raja, rendija o abertura y sellar el espacio de forma firme y robusta, evitando así que pase a través del material aire, agua sonido y otros.
En general, se utiliza para llevar a cabo aislamientos y revestimientos; como adhesivo o como protector en columnas; también como uno de los componentes esenciales de los neumáticos y de ciertas piezas de vehículos; y en la industria textil para la elaboración de algunas prendas de ropa deportiva y para la suela de los zapatos.
Si bien es cierto que las industrias en las que más se utiliza el poliuretano son:
- La industria de los electrodomésticos, en forma de espuma rígida, y para actuar como aislante y ahorrar así energía.
- La industria de la construcción, pues se considera uno de los materiales de mayor rendimiento por su aplicación fácil y rápida que, además, sirve como aislamiento de alta eficiencia energética en los edificios rehabilitados. Además de esto, también se le puede dar uso en el día a día y sirve para aislar todo tipo de cubiertas, agujeros o espacios problemáticos dentro de una vivienda.
- La industria automovilística, y es que el poliuretano es uno de los materiales más básicos, pues ayuda al ahorro del combustible y contribuye en la seguridad y en la comodidad de los asientos, las puertas, la carrocería, los techos, el parachoques, y otros elementos de un vehículo.
- La industria textil, pues aunque no lo parezca, el poliuretano se utiliza en muchas ocasiones para crear ropa, en especial para prendas de vestir que tienen la cualidad de ser elásticas, como sucede con camisetas o pantalones de nylon y de lycra y para crear accesorios varios y zapatos.
¿Para qué sirve el sellador de poliuretano?
Como hemos comentado anteriormente, gracias a la propiedad resistente y elástica del material, el poliuretano tiene diversos usos selladores, en especial el más habitual y extendido es el de utilizarlo para sellar todo tipo de juntas, agujeros o espacios muertos que pueden causar problemas.
De este modo, el sellador de poliuretano puede conseguir que se aísle totalmente un espacio o que, a través de estas grietas y juntas, se pueda, por ejemplo, impedir la entrada del frío o el viento en el caso de las puertas y ventanas; para llenar el hueco entre dos materiales difíciles encajar, como puede suceder dentro de un vehículo; o para impedir el movimiento entre dos fachadas a causa de la expansión de los materiales de construcción con los cambios de temperatura.
Hay que tener en cuenta que, al ser un material tan habitual dentro del campo de la construcción, cada vez han surgido más empresas fabricantes de este producto: Sin embargo, no a todas ellas se les puede otorgar el sello de calidad.
Esto implica que, si estás buscando comprar un aplicador de poliuretano con el fin de utilizarlo para sellar alguna junta en casa tú mismo, sin requerir de la ayuda de un profesional, puedes optar por hacerte con el sellador de poliuretano en JUCARSA, una marca muy fiable y excelentemente valorada por sus clientes, pues son una de las tiendas más profesionales dentro del ámbito de la venta de herramientas de construcción y de suministros industriales.
Ten en cuenta que aplicar un sellador de poliuretano de mala calidad puede el empeorar el estado de las grietas o agujeros, e incluso puede llegar a ser perjudicial y tóxico, de modo que vale la pena adquirir este producto de la mano de empresas especializadas en el bricolaje, la construcción y la decoración que sean seguras y de calidad.
Diferencia entre poliuretano y silicona
Tanto el poliuretano como la silicona son dos de los materiales más utilizados en el ámbito de la construcción para sellar y aislar entornos, sin embargo, aunque aparentemente son similares y comparten ciertas características, lo cierto es que existen diversos factores que los diferencian a la hora de escoger cuál es el más apto para llevar a cabo un trabajo otro.
Los factores principales que hay que entender respecto a la silicona son que, aunque este es muy buen aislante como sellador y es la opción más económica, también presenta ciertos inconvenientes como, por ejemplo, que no se adhiere sobre superficies húmedas o mojadas y tampoco cura por humedad ambiente. Además la silicona no tiene la propiedad de permitir que se lije ni se pinte encima, lo que la limita mucho más a la hora de tratarla estéticamente.
Por contra, si hablamos de las características del poliuretano, hay que entender que este es un material mucho más adhesivo desde su primer aplique, pues es mucho más pegajoso. Asimismo, puede soportar temperaturas extremadamente altas y esto permite que pueda utilizarse en juntas de dilatación. También cuenta con una elasticidad máxima del 500 %. La última de estas cualidades que diferencia a la silicona del poliuretano es que este sí que permite ser pintado y lijado. Sin embargo no toleran la radiación UV, y libera ciertos gases durante el proceso de aplicación que pueden ser irritantes, por lo que se recomienda trabajar este material en un lugar con una buena ventilación.
Cabe decir que también existen híbridos del poliuretano y la silicona que cuentan con características intermedias de ambos materiales y, por tanto, con las mejores propiedades de ambos.
¿Cómo quitar el sellador de poliuretano de las manos?
Como hemos explicado en el párrafo anterior, el poliuretano es un material extremadamente pegajoso y que se adhiere a la superficie con una rapidez excepcional.
Esto puede ser un problema si el producto llega a alcanzarnos las manos desnudas, ya que puede llegar a ocasionarnos algunas heridas, aunque no demasiado graves. Lo más importante es actuar con rapidez para eliminar por completo el poliuretano.
Ahora bien, ¿cómo podemos quitar el sellado de poliuretano de la piel? Pues la forma más rápida y eficaz de deshacernos de esta espuma es utilizando acetona, ya sea la habitual que se utiliza para quitar el esmalte de uñas como cualquier otra.
Para eliminar posibles manchas cutáneas también podemos frotar la piel con vaselina o con alcohol isopropílico del 91% y, tras unos minutos y un aclarado de la piel con agua y jabón, deberíamos ser capaces de limpiar por completo del poliuretano de las manos.